Que bueno fue Dios, que bueno es, y que bueno seguirá siendo. Porque su fidelidad es hoy y por siempre. Me siento mimada, me siento amada, y no se si pueda llegar a explicar todo esto que siento, este amor, esta pasión, esta plenitud que Él me da.
En todo este tiempo puedo ver su mano en mi vida, la paciencia que me tiene, la gracia que ha depositado en mi vida. Todo este camino recorrido, ver cómo a pesar de que estoy aprendiendo todo el tiempo-y mucho me falta por aprender- no me suelta la mano, camina a mi lado sosteniéndome con paciencia, guiándome hacia lo mejor. 
Me rodeó de gente maravillosa, de amigos que también me tienen mucha paciencia en este aprendizaje, a pesar de todos los errores que tengo y mi carácter- en proceso- ellos están ahi, retándome cuando es necesario, abriéndome los ojos algunas veces, dándome aliento y ánimo para seguir, y charlas de las mejores, esas que uno siempre se queda pensando.
Encontré lo mejor que cualquier persona puede hallar: un amor tan puro y sincero, y un propósito, una razón de ser en Cristo Jesús!